Los Cavs se resisten

Como cambian las cosas en tan solo una semana. Si en el último post comentábamos la posibilidad de los Warriors para proclamarse campeones fácilmente tras ganar sus dos partidos en Oakland, hoy nos encontramos un panorama totalmente diferente. 3-2 en la serie con victorias en casa ajena por parte de ambos equipos. Todo puede pasar.

Y es que en esta última semana ha pasado de todo. Los Cavs ganaron el primer partido en casa reduciendo la diferencia a un 2-1 pero cayeron en el cuarto dejando las finales prácticamente sentenciadas. O al menos eso parecía hasta que llegaron Lebron e Irving a Oakland para hacer un partido histórico. 41 puntos cada uno para combinar 82 de los puntos de su equipo. Una combinación que no se había registrado nunca en la historia y que por suerte nos lleva al menos a un sexto partido.

Y ahora...¿qué?:

En el tercer partido, el primero en Cleveland, los Warriors ni siquiera aparecieron. Malos porcentajes de tiro y poca intensidad en defensa que acabo con una paliza de los Cavs por más de 30 puntos. Sin embargo, en el cuarto partido aparecieron y de que manera. Liderados por sus estrellas, los Splash Brothers, decantaron el cuarto partido en su favor dejando un 3-1 que parecía definitivo. 

Un cuarto partido que nos dejo los mejores momentos de lo que llevamos de estas finales en los que hubo de todo. Mates, tapones, canastones y hasta piques entre Lebron con Green y Curry. Esta claro que Curry y Lebron no se llevan bien, pero el gran damnificado fue Green al ser suspendido para el quinto partido. Algo que Cleveland aprovechó para ganar en casa de los californianos y arruinarles la celebración del título en su propia casa. 

Las ausencias, la clave:

La baja de Green fue determinante. La ausencia del hombre que se ocupa de todo en estos Warriors fue una losa en defensa, lo que permitió el recital de Lebron e Irving  pero es que además en ataque se vio la falta de movilidad de balón que tanto aporta Green. Ahora recuperan a Green pero pierden a su pivot australiano Andrew Bogut por lesión en el último partido. 

Sin duda se les han complicado las cosas a los Warriros, pero no sufran por ellos. NADIE ha sido capaz de remontar un 3-1 en contra en una finales. y ahora las finales vuelven a Cleveland donde ya saben lo que es ganar.

Los Cavs todavía tienen algo que decir:

Por su parte, los Cavs cogen fuerza y moral tras haberles aguado la fiesta a los Warriros en Oakland. Ahora vuelven a casa y necesitan el mismo ambiente del tercer partido en "the Q" la cancha de estos Cavs para empatar la serie y forzar el séptimo partido, algo que solo ha pasado dos veces en la historia.  

Además, esta es la sexta final consecutiva de Lebron, una salvajada. Haber ganado tan solo dos de siete es algo que le debe escocer y mucho. Es por eso que en el último partido se puso en "modo superestrella" y así ha de seguir si no quiere llevarse un 2-5 en su casillero particular de finales de NBA.

Ya los ven NBAdictos la cosa esta que hecha humo. Por un lado los Warriors van a por su segundo título consecutivo pretendiendo enderezar unos Playoffs que se les han complicado y seguir incrementando su estadísticas con récords. Por el otro lado, los Cavs dispuestos a conseguir la más difícil de todas las hazañas, remontar un 3-1, algo que hasta ahora es inaudito. Solo uno podrá alcanzar la gloria, ¿quién será?

Lo sabremos en el próximo capítulo de NBAdictos.

Saludos!!!